La forma de recoger basura ha cambiado en Mislata en las últimas semanas. Tras la polémica sustitución de los antiguos contenedores, los actuales no cuentan con el pedal que permitía abrir la tapa, pronto vamos a ver en nuestras calles uno más, el contenedor de basura orgánica. Una muy buena noticia para el reciclaje y para convertir Mislata en una ciudad más sostenible.
Hasta ahora la basura orgánica que se generaba en los hogares de Mislata acababa en el contenedor gris. En este receptaculo iba todo lo que no se recoge de forma selectiva para su reciclaje. Pero, a partir de ahora, esta materia orgánica tendrá un tratamiento específico y un aprovechamiento. El Ayuntamiento, a través de Nemasa, ha lanzado un programa experimental para recoger por separado la basura orgánica. El proyecto en palabras de Carlos Fernández Bielsa, convertirá a Mislata en «una ciudad referente en políticas medioambientales y comprometida con el Objetivo Europa 2020 de reciclaje».
El quinto contenedor de basura orgánica en 25 puntos del municipio

El Ayuntamiento repartirá cestas marrones para favorecer el reciclaje.
El primer paso, es la instalación de este quinto contenedor marrón en 25 puntos del municipio. La segunda parte del programa y la más importante, concienciar a la ciudadanía de la importancia de utilizarlo. Así pues, se va a informar de los detalles concretos para su uso, incidiendo en qué tipo de residuos se pueden depositar y cuáles no. Como parte de la campaña informativa, ha explicado hoy la concejala de Medio Ambiente, Mª Luisa Martínez, «vamos a repartir unas cestas marrones para que los vecinos puedan separar en casa los residuos orgánicos y bolsas biodegradables, porque este aspecto es fundamental, ya que las bolsas se reciclan junto a los desechos».
Las recogidas de los contenedores orgánicos se realizarán diariamente, tal como ha informado el gerente de Nemasa, Fernando Díaz. Los residuos se trasladaran a la planta de tratamiento del EMTRE para su compostaje. De momento, se van a instalar 25 unidades como experiencia piloto. No obstante, como ya ha anunciado Bielsa, “esperamos que el proyecto tenga una buena aceptación y podamos ir incrementando progresivamente el número de contenedores orgánicos».
Qué introducir en los nuevos contenedores de basura orgánica
Los residuos orgánicos son todos aquellos que tienen un proceso natural de descomposición. Entre la materia orgánica se incluyen las pieles de las frutas y las hortalizas, las cáscaras de los frutos secos, de los huevos o de los mariscos, los huesos y las espinas, las plantas y restos de huerta y cualquier cosa de origen vegetal no cocinada. Además, también se consideran desechos orgánicos los posos del café y las infusiones, los palillos y tapones de corcho e incluso las servilletas y el papel de cocina.